Y grande afición
Los 15 primeros minutos del Sevilla fueron para enmarcar. Borró al Villareal del campo y lo hubiera hecho con cualquiera. En ese maravilloso periplo se fraguó el 1-0 obra y “arte” de Luis Fabiano tras prodigioso control y posterior certera definición. De crack.
Sin embargo, justo a partir de ese instante el Sevilla, como perfectamente dijo el propio Jiménez “se desenchufo” literalmente. Bien es cierto que el equipo levantino realizó un buen futbol, es un buen equipo, pero la impresión que daba a los 40.000 que allí nos dimos cita es que se dejó que lo hiciera. Es decir , como si en un combate de boxeo, uno de los púgiles bajara los brazos dejándose golpear inexplicablemente por el otro.
No encuentro explicación alguna , no creo que la haya, sin que cause vergüenza el escucharla. Quizás por ello Manolo dijo que “había que cambiar una cosita, se cambio y a partir de ahí todo funcionó”.
Lo cierto es que ese tiempo perdido en el limbo, los valencianos no solo empataron sino que remontaron con el 1-2. El empate fue en la primera parte. Manolo decía que esa “cosita” a retocar fue en el descanso, pero el equipo salió más o menos igual y pronto paso lo que todos, aunque no quisiéramos , sabíamos que pasaría. Es decir, el 1-2. Fue entonces cuando, a mi entender, realmente se cambió esa “cosita”; la entrada de Adriano y Kanute.
Adriano revolucionó al equipo, los sacó de ese inexplicable y desquiciante letargo. El Sevilla puso la quinta marcha y , a ese ritmo, no hay nadie en el mundo que nos aguante.
De nuevo Luis , con otro de talle de mago, con otra muestra más del fuera de clase que es este brasileño, se saco de su chistera un cabezazo –vaselina, a pase de Adriano, que superó a Diego López.
Poco después , en pleno éxtasis sevillista, cayó el 3-2 y la remontada perfecta. Kanute, otra vez a pase del todo poderoso Adriano, remacha de cabeza materializando las ilusiones de todos los presentes.
Este equipo tiene todo para hacer historia , todo, todo. No se puede permitir que pase lo que nos pasó ayer durante tanto tiempo. Quien tenga que buscar “la cosita” que lo provoca que lo busque y lo solucione. Pero no creo que sea Manolo quien deba hacerlo, creo que es más un asunto de los propios futbolistas.
Hacer mención también, cómo no, al colegiado, nefasto hasta no poder decir más. Pero lo realmente lamentable es el rasero que se está utilizando con nosotros. Pues el arbitraje de ayer no es más que la repetición de todos los que venimos sufriendo. Uno llega a la conclusión de que existe un rasero para el resto y otro para el Sevilla. ¿Será que incomodamos?
No quiero finalizar este post sin felicitar a Negredo por volver a ser convocado por la Selección, pero sobre todo a Don Jesús Navas, nuestro nuevo internacional.
Ya hablaré más adelante largo y tendido sobre este asunto , pues hay mucho que decir, pero no quería dejar de felicitarlo.
Seguimos ahí, donde no quieren que estemos, pero me da a mi que van a tener que joderse mucho este año…
Ahora At ciudad.
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