¡VICTORIA POR FIN!

Dura, trabajada, fea, y todo lo que quieran pero victoria.

Eso era lo único importante ayer, ganar, y eso se hizo.

Ganar para dejar de acostumbrarse a perder, ganar para reconciliarse con el sabor del triunfo, ganar, por qué no, para que una vez más, y van ciento y la madre, todos esos carroñeros que llevan aguardando el descalabro del equipo más grande que jamás existió en su propio estadio, tengan que envainársela y comérsela.

A seguir esperando chavalitos. ¡Que pena dan!

El partido de ayer fue horroroso de solemnidad, malo donde los pueda haber ,
Todo eso es cierto; un equipo desorganizado y manejado totalmente por la inseguridad y los nervios.

Un equipo, hay que decirlo aunque les duela a muchos, y más sí les duele J ,triturado por las lesiones , con jugadores quemados de partidos, con un banquillo febril, Fazio(esto no lo comenta ni dios) tenía 39 de fiebre y , además, jugó.

Partido malo, malo, pero ganamos, (¿Jode? ¿eh?) y rompemos esa fatídica racha que nos a traído esos nervios y esa inseguridad.

A tres puntos del cuarto, a cuatro del segundo y tercero y a cinco del primero.

¡Que pedazo de crisis! ¡Si señor!

Nada más, solo eso; QUE HEMOS GANADO, eso era lo importante.

Bueno si, algo más, como hay tantos de estos que les gustan los “Y si...” y demás chufladas, os dejo una reflexión de ese estilo para que reflexionemos todos;

¿Dónde estaríamos ahora si no hubiéramos pinchado , algo que entraba dentro de lo normal, en Valladolid y con el Málaga?...

Como le dijo Homer al reverendo Love joey : “Medite, medite”...